¿QUÉ ES UN HONGO?. APORTES NUTRICIONALES
INTRODUCCIÓN
Desde el inicio de los tiempos, los hongos y el hombre han ido evolucionando conjuntamente a lo largo de la vida. Los hongos han sido utilizados como alimentos, como elementos transformadores de los mismos, para la cura de enfermedades e incluso se han utilizado como sustancias alucinógenas en fiestas y ceremonias religiosas.
Las nuevas demandas sociales fomentan un mayor contacto con la naturaleza y una necesidad de ocio al aire libre. El aumento de la afición a la recogida de setas en los últimos años es un aspecto más de estos cambios sociales. Las áreas de montaña responden a esta demanda, ofreciendo una riqueza natural, que sin embargo, no repercute en su desarrollo.
La riqueza micológica de estas áreas, bien gestionada, permitiría una explotación sostenible que pondría en valor nuestros bosques, al tiempo que se traduciría en una herramienta de desarrollo rural, a través de aspectos como la explotación de las propias setas, la silvicultura, el mico turismo, la gastronomía, los alojamientos rurales, etc.…
Es también necesario fomentar una correcta educación ambiental que garantice la explotación sostenible de este recurso y su preservación para disfrute de las generaciones venideras.
Lamentablemente, es inevitable que la gente que va al bosque a buscar setas cada año altere de alguna forma el ecosistema. Es necesario ser respetuoso con el entorno y, además de no ensuciarlo tirando basura, procurar no dejar señales por allá donde se pasa. Por ejemplo, se puede evitar no hacer un agujero en la tierra cada vez que se recoge una seta. Tampoco se han de destruir aquellas especies tóxicas o que no se conocen (pegándoles una patada, por ejemplo), ya que tienen una función muy importante dentro de su entorno.
Otro problema muy importante es la sobre recolección, es decir, el agotamiento de “recursos” en el bosque, porque se haya extraído un exceso de setas en una zona determinada. Es muy importante no recolectar aquellas setas demasiado pequeñas para permitirles que hagan su función: dispersar las esporas para que generen así nuevos lugares productores de setas. De alguna manera se pretende que se produzca una “regeneración” de las setas a lo largo de los años.
Dicho lugar no es privilegiado únicamente por disponer del recurso de las setas, sino también por sus paisajes. Se respira aire puro y naturaleza por los cuatro costados.
En El Recuenco, así como en las comarcas limítrofes, predominan los pinares, y esto determinará en gran medida, junto con el tipo de suelo (ácido o básico) y la climatología, la variedad o diversidad de setas que se podrán encontrar en estos parajes. Por todo el término municipal, predomina el pino negral (Pinus nigra), pino albar (Pinus sylvestris) junto con carrascas (Quercus ilex), sabina albar (Juniperus thurifera), robles (Quercus faginea), y un sotobosque donde el romero (Rosmarinus officinalis) y el tomillo (Thymus vulgaris) son las especies más frecuentes.
EQUIPAMIENTO
Equipo fundamental para salir a buscar setas es:
CONSEJOS PARA RECOGER SETAS
- Para poder disfrutar al máximo de la naturaleza se debe evitar entrar en el bosque con coche. Caminar también forma parte del “ritual de ir a buscar setas”.
- Es recomendable ir siempre acompañado.
- Es importante dejar dicho dónde se va.
- No destrozar o estropear las setas que no se conozcan.
- Se ha de procurar hacer el menor ruido posible.
- No se ha de lanzar basura al bosque.
- Dejar el bosque como lo hemos encontrado. No utilizar rastrillos, hoces, azadas u otras herramientas que puedan afectar a suelo.
- No se ha de hacer fuego bajo ningún concepto.
- No hacer caso de tradiciones o falsos mitos para su reconocimiento.
- No recolectar setas durante la noche.
- Por si acaso deje una muestra en el frigorífico de cada especie que consuma.
- Tener siempre a mano Teléfono de Urgencias Toxicológicas: 91 5 620 420.
- Revisar las setas que hemos cogido.
- Estar totalmente seguro de las setas que se han recogido y las que te vas a comer, ante la más mínima duda, no consumirlo. Revisar las setas con un experto o una Sociedad Micológica.
DESDE LA ANTIGÜEDAD
Los hongos son unos organismos que desde siempre nos han fascinado. Nos rodean por doquier, y han sido empleados para los más diversos y extraños menesteres, en ocasiones sin que nos percatáramos de ello. Por ejemplo, la fermentación. Los pueblos antiguos, como los egipcios, han usado a las levaduras, para obtener cerveza, vino y pan (lo consideraban un don de Osiris). Los romanos celebraban las Bacanales, en honor a Baco, dios del vino. De hecho, la ingestión de bebidas alcohólicas, aparte de la euforia asociada a ellas, era necesaria para nuestros antepasados.
El agua corriente, debido al desconocimiento de las medidas higiénicas, podía provocar desde diarreas a enfermedades más graves. En cambio, el vino y la cerveza eran inofensivos y además el alcohol servía de germicida. Por supuesto, las antiguas bebidas alcohólicas no eran tan fuertes como los licores actuales, fruto del desarrollo de las técnicas de destilación.
Al igual que el alcohol, muchos hongos desempeñan un gran papel en las religiones, ya que en ocasiones son necesarios para alcanzar estados alterados de consciencia. Los chamanes siberianos solían emplear la seta Amanita muscaria, también Psilocybe cubensis, un hongo alucinógeno, es usado en ciertas ceremonias religiosas americanas. También se han utilizado carpóforos de Fomitopsis officinalis (un yesquero) para tallar figuras sagradas. Incluso se llegó a creer que algunos hongos, como setas y trufas, eran directamente generados por los dioses (por el rayo de Júpiter).
Los hongos yesqueros han sido utilizados para encender fuego. Concretamente, los carpóforos secos de Fomes fomentarius se molían, y el polvo resultante era conocido como yesca, muy inflamable. Su uso es muy antiguo; se han encontrado restos de yesqueros en la momia del Hombre de los Hielos hallado en Tirol.
También hay hongos luminiscentes (foxfire), usados incluso por algunos soldados en incursiones nocturnas. No sólo las setas brillan en la oscuridad, sino la madera atacada por el micelio.
Realmente, la gente no suele ser consciente de la importancia de los hongos en nuestras vidas. De hecho, muchos de nosotros estamos vivos gracias a ellos. Hace no demasiadas décadas, la tasa de mortalidad infantil era elevadísima. Una simple septicemia podía llevarle a uno a la tumba. A partir del descubrimiento de la penicilina, los antibióticos han salvado incontables vidas. Otro antibiótico fúngico interesante es la ciclosporina. Incluso hay hongos que producen taxol, un anticancerígeno.
Las setas comestibles son conocidas desde tiempo inmemorial. En China se cultivan desde el año 600 a. C., mientras que en Europa se empezó hacia 1650. Hoy son cultivadas muchas especies que crecen en estiércol, paja, desechos de arroz y otros sustratos baratos.
¿QUÉ ES UN HONGO?. APORTES NUTRICIONALES
Como ya sabéis todos, la ciencia que estudia los hongos es la Micología.
¿Qué es un Hongo?
Los hongos son un grupo extraordinario de organismos esenciales en el reciclado de todo tipo de materia orgánica en el planeta. Cuando pensamos en un hongo la primera imagen que se nos ocurre es la de una seta, sin embargo las setas son el órgano reproductor que contiene las esporas de un reducido grupo de hongos, los llamados “macromicetes”. Mientras que el cuerpo principal de los hongos está formado por un conjunto de tuberías microscópicas, llamadas hifas, que forman un entramado llamado micelio que crece y se desarrolla, generalmente de forma subterránea, en el sustrato donde vive. En ciertas fases de su desarrollo y cuando las condiciones son favorables se produce la aparición de los llamados cuerpos fructíferos, carpóforos o setas, con formas y caracteres organolépticos definidos. Es en esta fase cuando el hongo macromicete puede ser identificado a través de las características que las setas presentan.
Micelio
Los hongos influyen en casi todos los procesos ecológicos.
Quizás el primer empleo directo que se les dio a los hongos es el de alimento.Mucho se ha discutido sobre el valor nutritivo de ellos, si bien es cierto a la mayoría se les puede considerar con elevada calidad porque contienen una buena proporción de proteínas y vitaminas y escasa cantidad de carbohidratos y lípidos.
- Proteínas: Se cree que estos alimentos tienen más proteínas que la mayoría de los vegetales, debido a su buen balance de aminoácidos, siendo una excelente opción en dietas vegetarianas.
- Vitaminas y minerales: Tienen una gran cantidad de estos alimentos básicos en nuestra dieta diaria.
- Son bajos en calorías, debido a su poca cantidad de H de C y grasas, siendo una buena opción para controlar el peso.
- Son ricos en antioxidantes, y otras sustancias, que estimulan el sistema inmunológico, reducen el colesterol y disminuyen la tensión arterial.
- Son bajos en sodio.
Dentro de los más consumidos tenemos: Boletus edulis, Lactarius deliciosus, Russula brevipes y Amanita caesarea.
Otros hongos que se consumen notablemente son: Agaricus campestris y A. bisporus, comúnmente conocidos como “champiñones”; la importancia de éstos se debe a que son de las pocas especies que pueden cultivarse artificialmente y de manera industrial. Los hongos microscópicos también han invertido directa o indirectamente para la creación de fuentes alimenticias y representan una expectativa de apoyo para el futuro; en este campo cabe citar los trabajos de obtención de biomasa, a partir de levaduras como Candida utilis, que se usa para mejorar el alimento.
Clasificación de los Hongos
Dentro de la clasificación de los hongos hay muchas clasificaciones, complejas y heterogéneas, basadas en diferentes aspectos, nosotros hemos tomado la que a continuación os detallo porque actualmente es la que se está tomando como base.
Phylum Ascomycota: PEZIZOMYCETES
Son el grupo de mayor número de especies del reino de los hongos. Entre ellos están las levaduras y los mildiús pulverulentos, muchos de los mohos negros y verde-azulados comunes, las colmenillas y las trufas.
Algunos miembros de este grupo de hongos causan muchas enfermedades a las plantas; otros son productores de toxinas, pero también se encuentran algunos que son fuente de muchos antibióticos.
En los pezizomycetes las hifas están divididas por paredes transversales o tabiques. Cada compartimiento generalmente contiene un núcleo separado, pero los tabiques tienen poros a través de los cuales pueden moverse el citoplasma y los núcleos. El ciclo de vida de un pezizomycete incluye típicamente tanto la reproducción asexual como la sexual. Las esporas asexuales se forman comúnmente aisladas, o en cadenas, en el ápice de una hifa especializada. Se caracterizan por ser muy pequeñas y numerosas, y se las denomina conidios, (del griego konis: “polvo”).
La reproducción sexual en los pezizomycetes implica siempre la formación de un asco (“pequeño saco”), estructura que caracteriza a este phylum.
En la mayoría de los ascomicetes, los ascos se forman en estructuras complejas llamadas ascocarpos. A la madurez, las ascas se vuelven turgentes y finalmente estallan, liberando a sus ascósporas explosivamente al aire.
Phylum Basidiomycota: AGARICOMYCETES
Los agaricomycetes constituyen el grupo de hongos más familiar, ya que incluyen a los hongos de sombrero o setas. La seta -fructificación o basidiocarpo- es el cuerpo fructífero en donde se producen las esporas. Está compuesto por masas de hifas fuertemente compactas.
El micelio, a partir del cual se producen las setas, forma una trama difusa que puede crecer radialmente varios metros. Las fructificaciones habitualmente se forman en los bordes externos del círculo, donde el micelio crece más activamente debido a que ésta es el área en la cual hay más nutrientes. En consecuencia, las fructificaciones aparecen en círculos y, a medida que el micelio crece, el diámetro de los círculos va haciéndose cada vez mayor.
Muchas veces, cuando dentro de un círculo crecen hierbas, éstas tienen un color distinto y un desarrollo menor como consecuencia de la actividad del micelio. Estos círculos de setas, que pueden aparecer en un prado de la noche a la mañana, se conocen como “corros de brujas”. Luego, el protoplasma penetra en las nuevas hifas del cuerpo fructífero a medida que éste se forma por encima del suelo. En este proceso, el micelio requiere una gran cantidad de agua, por lo que es común que los setas “aparezcan” después de abundantes lluvias.
Sus esporas se encuentran en el exterior de ciertas células, a las que están unidas, su himenio suele estar en la parte inferior, formando láminas, tubos, o aguijones. En este grupo se encuentran las especies más interesantes para el aficionado.
Como en el caso de los Ascomycetos, los distintos hongos se agrupan en Clases, Familias y Géneros, fundamentalmente. Destacamos los siguientes géneros: Agaricus, Amanitas, Coprinus, Lepiotas, Hygrophorus, Lactarius, Russulas, Tricholomas, Mycenas y muchos más.
¿Dónde viven los hongos?
Por su modo de vida los hongos se pueden comportar como parásitos, saprófitos o simbiontes mutualistas.
Los hongos parásitos son aquellos que viven a expensas de sus huéspedes (biotrofos), debilitándolos y llegando en algunos casos a matarlos (necrotrofos), lo que puede producir la desaparición del hongo, pero en algunos casos el hongo cambia su comportamiento y pasa a un modo de vida saprófito.
Los hongos saprófitos son aquellos que viven de la rotura y digestión de las sustancias orgánicas muertas o de desecho, tanto de origen vegetal como animal, e incluso de otros hongos, comportándose como recicladores de la “basura” del bosque. Los hongos saprófitos junto con insectos y bacterias producen la riqueza húmica del suelo.
Por último algunos hongos simbiontes: mutualistas, forman líquenes y otros se instalan sobre el sistema radicular de una planta huésped determinada, formando lo que se llaman micorrizas. Muchas de las setas más conocidas son micorrizas ectotróficas o ectomicorrizas hacen que las raíces de las plantas aumenten su área de influencia hasta diez veces con lo que su capacidad de absorción de agua y sales minerales, sobre todo los polifosfatos, se multiplica, y esto hace que crezcan mejor y más rápido. Por su parte el hongo recibe hidratos de carbono que ha elaborado la planta mediante la fotosíntesis y que él no es capaz de producir.
ECOSISTEMAS
Un ecosistema es un sistema biológico, constituido por una comunidad de seres vivos y el medio natural en que viven. Pueden ser zonas tan reducidas como un charco o tan amplias como un bosque.
Podemos dividirlos en dos grupos: acuáticos y terrestres (hongos basidiomycetes)
Todo el suelo del bosque está ocupado por micorrizas y se estima que el 85 % de las plantas superiores están asociadas a hongos, que son necesarios para la salud forestal. Por eso la protección de las setas es también la protección de los bosques y viceversa.
Bosques de Rivera y Prados
Pinos y Encinas
Dependiendo de las características de cada ecosistema (tipo de suelo, tipo de flora humedad, temperatura, etc.) donde se reproduzca el hongo, encontraremos un tipo de setas u otras.
Por ejemplo en los Prados podemos encontrar las siguientes especies:
Agaricus Albertii, Agaricus campester, Agaricus xanthodermus, Agaricus arvensis (diferentes tipos de champiñón), Pleurotus eryngii (seta de cardo), Marasmius oreades (senderuela), Coprinus comatus (barbuda, setas de tinta), Macrolepiota procera (Parasol).
En las Encinas:
Amanita ovoidea, Boletus lupinus, Hygrophorus russula, Amanita phalloides, Boletus impolitus, Amanita rubescens, Boletus aereus, Leccinum lepidum, Amanita caesarea, Cantharellus cibarius, Macrolepiota procera, Lactarius piperatus, Ganoderma lucidum, Hydnum repandum, Amanita vaginata, Lepista nuda, Clitocybe geotropa, Tricholoma terreum, Amanita ovoidea, Amanita phalloides, Licoperdum Perlatum…
En los Pinares:
Agaricus silvaticus, Agaricus silvícola, Amanita muscaria(Seta de los enanitos) Amanita phalloides (seta mortal), Cantharellus cibarius, Cantharellus lutescens, (Rebozuelo), Chroogomphus rutilus (pie de perdiz), Hydnum repandum (Lengua de vaca), Hygrophorus gliocyclus (Llanega blanca), Hygrophorus latitabundus (Llanega negra), Lactarius deliciosus (hongo, nizcalo), Lactarius sanguifluus( hongos o nizcalo borracho) Lepista nuda(Pie azul), Lycoperdon perlatum (Pedo de lobo), Tricoloma equestre (Seta de los caballeros), Tricholoma terreum(negrilla o ratoncillo), Boletus edulis, Boletus pinophilus.
MORFOLOGIA DE LAS SETAS
CARACTERÍSTICAS MACROSCÓPICAS
Las setas son los cuerpos fructíferos de los hongos, y que permiten su reproducción, existen gran diversidad en cuanto a la morfología y estructuras de las setas, en función del grupo o familia a la que correspondan.
En cuanto a la identificación siempre nos basamos en las principales generalidades macroscópicas de las setas, es decir, todo aquello que podemos ver in situ en el bosque y que nos dará una primera aproximación, aunque luego se estudie más detenidamente para afinar en la especie que tenemos entre las manos.
MICELIO: parte del hongo que no se ve a simple vista, es el propio hongo que está formada por tubos microscópicos llamados Hifas y va creciendo bajo tierra, normalmente en forma radial. Solo se puede apreciar cuando está a punto de formar el cuerpo fructífero de la seta en el que los micelios se comienzan a unir apareciendo una telaraña blanca justo al pie de la seta.
Todas las setas necesitan un micelio ya que es parte de la misma, pero no todos los micelios forman los carpóforos o setas de los Macromicetes.
EL SOMBRERO: es la parte de la seta que primero se ve y por tanto es muy importante tener claro sus diferentes aspectos. Pueden tener formas muy diversas. Además a la hora de estudiar el sombrero es importante reconocer la edad de una seta, ya que un sombrero joven puede ser muy diferente a uno viejo, y no solo la forma si no el color también puede variar con la edad y con la humedad, una zona muy húmeda puede cambiar la tonalidad o la viscosidad de la seta haciéndonos dudar de la especie que tenemos entre las manos.
Estas son las formas más representativas de sombreros de las setas, aunque hay muchas otras, ya que hay setas que pueden tener un sombrero en forma de globo u ovoide, o incluso ser totalmente plano, pueden tener el borde enrollado, y dentro de los bordes irregulares puede estar ondulado, estriado o rajado de forma natural. Otras características de los sombreros como la viscosidad de la cutícula o si tienen parte de velo por encima en forma de escamas o verrugas son caracteres que definen claramente una seta.
Ovoide Acampanado Hemisférico Globoso Cónico Aplanado Mamelonado Convexo Embudado
EL HIMENIO: Es la parte de la seta que se encuentra debajo del sombrero y es la que contiene las esporas y se encarga de expulsarlas en el momento en el que se encuentren maduras. Igual que el sombrero puede variar mucho su coloración en función de si la seta es joven o vieja, ya que cuando son adultas, el himenio suele adoptar el color de las esporas.
Las principales formas son Láminas, Poros, Pliegues y aguijones:
En cuanto a las láminas hay gran variedad de combinaciones que nos pueden indicar de que seta se trata, según su disposición, respecto al pie pueden estar separadas, libres, escotadas, adnatas, unidas o ser decurrentes prolongándose sobre el pie. En ocasiones a parte de las láminas pueden poseer laminillas intermedias a parte de las principales.
EL PIE: Es la parte que sujeta el sombrero y el himenio y que da porte y tamaño a la seta, también hay muchas formas diferentes que dan carácter a las setas.
En el pie es importante fijarse en el tamaño, anchura y altura del mismo y si tiene algún componente adicional como puede ser el anillo, la cortina o la volva.
En cuanto a color no suelen variar, excepto en algunos casos pueden cambiar de color al corte, lo que nos indica sin dudas algunas especies. Incluso la posibilidad de separarse fácilmente del sombrero es una característica más de identificación.
A parte de estas formas, también son características la superficie del pie pudiendo ser liso, fibroso, estriado, aterciopelado, granuloso, rugoso, escamoso, jaspeado, reticulado, o con manchas.
Y si lo cortamos podemos ver si el pie está relleno, hueco o cavernoso.
ANILLO: La formación de este elemento se produce durante el crecimiento de la seta, cuando es joven el himenio está protegido por una cubierta que al crecer se rompe quedando este resto en el pie en forma de anillo en algunos casos, ya que no siempre está presente.
El anillo puede ser: simple o doble, fijos o móviles, embudado, escamoso, harinoso, granuloso, en forma de faldita o de rueda de carro. En ocasiones el anillo puede ser muy débil y que desaparezca fácilmente, lo que complica la identificación.
VOLVA: cuando la seta es joven puede estar envuelta por un velo que al crecer se rompe al igual que pasa con el anillo, este resto se localiza en la parte inferior del pie y lo cubre y casi siempre se encuentra enterrado. Este rasgo es muy característico y puede servir para identificar a algunas setas mortales, por este motivo y para observar claramente si hay o no volva, las setas no se deben cortar, si no arrancar para no perder este importante rasgo característico.
A parte de las más comunes hay que fijarse si la volva es harinosa, escamosa, membranosa, adherente, fugaz, envolvente, sacciforme (forma de saco), circuncisa, anillada o hemisférica.
CORTINA: El resto del velo que protege las esporas no desaparece del todo y se queda en forma de hebras o cortina, es un rastro característico de los cortinarios, grupo de setas que en su mayor parte son tóxicas y algunas de ellas se pueden confundir con otras comestibles por su forma y coloración, diferenciándose claramente por los restos de cortina.
FALSOS MITOS DE LA MICOLOGIA.
El hondo arraigo que los hongos tienen en la cultura popular ha quedado reflejado por una amplia representación en el refranero pero también en un conjunto de mitos, creencias erróneas y tópicos que vienen siendo transmitidos de generación en generación por transmisión oral.
La mayor parte de estos mitos tienen que ver con la distinción entre las setas comestibles y las venenosas y su fundamento técnico o científico es bastante más que dudoso.
El más conocido de ellos es el de cocer las setas con una cucharilla de plata, que ennegrece si se trata de una especie tóxica. El fundamento de esta falsa creencia radica en la suposición de que las sustancias venenosas presentes contengan en su molécula azufre, que se liberaría en la cocción para oscurecer la plata por formación del sulfuro correspondiente. La investigación ha revelado, sin embargo, que las amanitinas, altamente tóxicas, no son azufradas, por lo que no ennegrecerían la cucharilla. Esta evidencia basta por sí sola para dar al traste con el mito de la “cucharilla de plata”, que ha ocasionado no pocas intoxicaciones.
Una extensión del mito precedente, utilizando un ajo en lugar de una cucharilla de plata, carece todavía de mayor fundamento.
Otro de los mitos comunes afirma que sólo son venenosas las setas de colores vivos, lo que se refuta rápidamente si se piensa en el anodino color de la Amanita phalloides, la A. verna o la Lepiota brunneoincarnata (blancuzco), especies generalmente mortales. Por el contrario, una excelente comestible como la oronja de los césares (Amanita caesarea) tiene el sombrerillo anaranjado y las láminas de un fuerte color amarillo.
La capacidad neutralizante de la condimentación protagoniza algún otro mito. Se ha afirmado que si las setas se cuecen y se elimina el agua de cocción pierden su posible carácter tóxico, lo que da por sentado que las toxinas han de ser solubles en agua y que además se destruyen con el calor, lo que falla estrepitosamente en el caso de las varias veces mencionadas amanitinas de las setas hepatotóxicas. Una secuela de esta falacia es la que afirma que la maceración con sal y vinagre transforma las especies tóxicas en comestibles, lo que carece todavía de mayor fundamento que lo anterior, y debe ser igualmente rechazado por empírico y carente de veracidad.
Por último, en algunos lugares se afirma que una prueba irrefutable acerca de la toxicidad de una seta es su cambio de color al cortarla, suponemos que basándose en el fenómeno que tiene lugar en algunos Boletus (el Boletus satanas, por ejemplo, azulea al corte). Sin embargo, la capacidad diagnóstica de este método se viene abajo con dos ejemplos más: la carne del apreciado Boletus spaciosus también vira a azul tras el corte mientras que la temible Amanita phalloides permanece inalterada.
En resumen, la única certeza acerca de la toxicidad o no de una seta vendrá dada por su correcta e inequívoca identificación. Recuérdese que, volviendo al refranero,
“Todas las setas son comestibles, pero algunas sólo una vez”.
¿POR QUÉ SE INTOXICA LA GENTE?
- POR IGNORANCIA
- POR CONFUSIÓN
- POR EXCESO DE CONFIANZA
- POR LOS FALSOS MITOS
SI TENEMOS DUDAS SOBRE ALGUNA DE LAS ESPECIES QUE HEMOS COGIDO NO CONSUMIRLAS, CONSULTAR CON UN EXPERTO.
INTOXICACIONES
Aunque las setas han acompañado al hombre como alimento desde hace miles de años, es fácil detectar en grandes sectores de población un temor más o menos justificado hacia su toxicidad. Se conocen en España alrededor de 3.000 especies diferentes de setas, de las cuales únicamente unas 100 son consideradas tóxicas, y apenas una decena mortales. Sin embargo todos los años se producen en nuestro país entre 250-300 casos de intoxicación por setas, la mayor parte de ellas no mortales.
Clasificación de las Intoxicaciones:
- Tiempo de Latencia o Periodo de incubación: Tiempo que pasa desde la ingestión de la seta y la aparición de los síntomas.
- Tiempo de Latencia corto (Menos de 6 horas, intoxicaciones leves), este tipo de intoxicaciones de inicio rápido suelen ser menos peligrosas y se resuelven tras un cuadro de gastroenteritis, alucinatorio, dilatación de las pupilas, sequedad de las mucosas o intolerancia al alcohol.
- Tipo de Latencia largo (Más de 6 horas, intoxicaciones graves), este tipo de intoxicaciones suelen ser de mayor gravedad, donde pueden aparecer lesiones renales, problemas hepáticos fulminantes, con necesidad de trasplante, si se llega a tiempo. Actualmente la mortalidad es baja, pero todos los años se produce alguna muerte.
- Por el tipo de síntomas que aparecen
¿QUE HACER MIENTRAS LLEGA EL MÉDICO O SE TRASALADA AL INTOXICADO?
- Mantener la calma
- No intentar hacer diagnósticos al ver los síntomas
- Recoger restos de las setas consumidas
- Intentar precisar el inicio de los síntomas, para calcular el tiempo
- Tranquilizar al paciente, mantenerlo hidratado y acostado.
JOSE DE PEDRO MEDRANO